Las cinco bibliotecas más espectaculares de España

1. Real Biblioteca del Monasterio del Escorial (Madrid)

Esta espectacular biblioteca se encuentra en el interior del Monasterio del Escorial y fue fundada por Felipe II en el siglo XVI. El rey contó con la colaboración de varios humanistas que hicieron de esta biblioteca mucho más que un espacio de lectura. Además de las grandes obras de la literatura que llenan sus estanterías, la biblioteca fue planteada como un lugar de estudio y de saber con dibujos y grabados; mapas y esferas; astrolabios y reproducciones de fauna y flora, entre otros.

El Salón Principal tiene 54 metros de largo y se conoce como ‘el Salón de los Frescos’: su bóveda está inundada de impresionantes pinturas que hacen de esta biblioteca una joya no sólo para el conocimiento, sino también para la vista. Hoy en día, esta construcción forma parte del Patrimonio Nacional.

2. Biblioteca de la Universidad Pompeu Fabra (Barcelona)

Esta maravilla de la arquitectura se encuentra en pleno campus de la Universidad Pompeu Fabra, en la Ciutadella. Su diseño es muy particular, y es que fue instalada en 1992 en un antiguo depósito de aguas construido a finales del siglo XIX, en el que participó el mismísimo Antoni Gaudí cuando aún era estudiante de arquitectura.

Ten cuidado, no te pierdas en su interior. Esta biblioteca es en sí misma un laberinto de arcos paralelos de catorce metros de altura, que se cruzan y se extienden como por efecto de un espejo a lo largo de 65 metros de profundidad. Esta estructura está directamente inspirada de un prototipo romano.

3. Biblioteca de la Universidad de Salamanca (Salamanca)

Esta biblioteca nació en el siglo XIII como una ‘estación de libros’: se trata por tanto de una de las más antiguas de España. Se encuentra en el edificio más importante de la universidad, las Escuelas Mayores (como ya vimos hace unas semanas en el blog).

La biblioteca es una sala única abovedada llena de estanterías de pino. Esta estructura se conserva desde el siglo XVIII, cuando tuvo lugar la reconstrucción de la bóveda después de un desafortunado derrumbamiento que un siglo antes acabó con dos terceras partes del espectacular techo. La antigua bóveda, con un firmamento cuajado de constelaciones zodiacales y planetas, conocido como la Bóveda del Zodiaco, es una joya astronómica que se llevó a cabo su restauración y reconstrucción y fue trasladada al edificio de las Escuelas Menores. Esta reforma cambió completamente el edificio, del que sólo se salvó la portada gótica de piedra y la reja que la protege.

4. Biblioteca América (Santiago de Compostela)

Gumersindo Busto, un emigrante gallego afincado en Buenos Aires, creó este espectacular espacio cultural en 1926, como homenaje al pueblo americano. No se trata de una biblioteca al uso sino que es un verdadero museo, con monedas, libros y mapas – aunque uno de sus platos fuertes es la obra más antigua de todo Santiago de Compostela, el Libro de Horas de Fernando I de León, que data del año 1055.

Se trata de una construcción centenaria, que forma parte del Patrimonio Cultural de la ciudad.

5. Biblioteca Menéndez Pelayo (Santander)

El escritor Marcelino Menéndez Pelayo legó al morir en 1912 los 42.000 volúmenes de su colección al Ayuntamiento de Santander, que decidió entonces encargar al arquitecto Leonardo Rucadabo el diseño de la biblioteca sobre la del propio Menéndez Pelayo, respetando su esencia.

El edificio de la biblioteca, de estética historicista, está cubierto de vidrieras que llenan sus estanterías de luz natural. No pierdas de vista su fachada, con motivos herrerianos, y, en particular, la fachada sur, dividida en dos cuerpos unidos por una escalera. Una gran estatua de mármol de Menéndez Pelayo preside el jardín, donde también encontramos una placa con un extracto del testamento del escritor.