Un año de sostenibilidad

Lafarge y Holcim se fusionaron en julio de 2015 para dar creación a la mayor empresa a escala mundial en el sector de los materiales de construcción. La nueva empresa se propuso entonces aprovechar esta posición privilegiada para promover y liderar la carrera por la sostenibilidad en un sector especialmente vulnerable en este aspecto – “para dar ejemplo y afianzar nuestra posición”, en palabras de Isidoro Miranda, Director General de la compañía. El Informe de Sostenibilidad recién publicado resulta pues crucial al analizar la andadura del nuevo grupo en términos de sostenibilidad.

Entre los datos más llamativos del informe, se puede destacar:

• Sólo en 2015, la empresa ha aportado cerca de 400 millones de euros a la economía española, gracias a los impuestos, la contratación de servicios, los salarios de los trabajadores, las acciones de Responsabilidad Social Corporativa y la inversión en investigación y desarrollo.
• En relación al agua y el medio ambiente, en 2015, LafargeHolcim utilizó un millón de metros cúbicos de agua, una cantidad que demuestra la máxima optimización en los vertidos y en los sistemas de reutilización.
• La reutilización es también una de las bases del apartado de economía circular del informe: gracias a Geocycle, la filial del grupo centrada en este campo, se gestionaron más de una tonelada de residuos.
• Acuerdos como el firmado en París recientemente demuestran la preocupación general por el clima. A este respecto, nuestras fábricas de cemento optaron por los combustibles alternativos, menos perjudiciales para el medio ambiente, que representan un 35% de la energía utilizada durante el año 2015.

Estos y otros datos reflejados en el informe demuestran el duro trabajo de LafargeHolcim en lo que a sostenibilidad se refiere. Sin embargo, es importante mirar hacia delante y seguir esta filosofía que poco a poco la empresa ha ido trazando. En este sentido, el Plan 2030 sirve como hoja de ruta para el grupo pero también para todo el sector de la construcción. Este plan nace directamente del Acuerdo del Clima de París y de los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados por las Naciones Unidas. En concreto, esta estrategia a quince años vista cumple con 14 de los 17 objetivos dictados por el organismo, que se enmarcan en cuatro pilares: el clima, la economía circular, el agua y medio natural y las personas y comunidades.