Esta semana hemos dado a conocer las principales conclusiones del Informe de Sostenibilidad 2016 y los objetivos de sostenibilidad para España en el horizonte 2020. Estos se enmarcan dentro del Plan 2030, la hoja de ruta en materia de sostenibilidad del Grupo, y dan respuesta a 14 de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.
Con este plan, buscamos convertirnos en un referente en el sector de la construcción promoviendo una visión sostenible e innovadora. Para ello, gran parte de los esfuerzos de la compañía están orientados a la mejora de las instalaciones, a la obtención de certificados, así como a la investigación en nuevos materiales y procesos que disminuyan la emisión de Co2 a la atmósfera o el uso del agua en las operaciones de cemento, entre otros.
El Plan 2030 se sustenta en cuatro áreas: clima; economía circular; agua y medio natural y personas y comunidades. Para cada una de ellas, la compañía ha desarrollado unos objetivos tanto a nivel Grupo como a nivel regional a cumplir. Por ejemplo, entre los retos marcados de cara a 2020, se encuentra el de alcanzar una tasa de sustitución térmica, gracias a la valoriazación de residuos de un 49% y una reducción de las emisiones específicas de CO2 del 15%, con respecto a niveles de 1990.
En el ámbito de la gestión del agua y del medio ambiente, nuestra meta para 2020 consiste en reducir del consumo de agua un 33% por tonelada de cemento, y seguir contando con el asesoramiento de expertos independientes en el campo de la biodiversidad para la restauración de nuestras canteras.
Para 2020, pretendemos que el número de beneficiarios directos de los programas sociales emprendidos en España alcance los 300.000, frente a los 50.000 de 2016 y contar con un plan de acercamiento a las comunidades en todas las instalaciones.
Metas alcanzadas en 2016
Además de los retos a futuro, entre los principales logros alcanzados durante 2016 del Plan 2030, destaca la tasa de sustitución de combustibles fósiles. El 38% de la energía empleada se obtuvo a través de combustibles renovables, de los cuales un 40% se correspondía a biomasa, lo que supuso un incremento del 3% con respecto a 2015, evitando así la extracción de 320.329 toneladas de materias primas. Las emisiones de gases de efecto invernadero se redujeron el pasado año en un 0,6% toneladas de CO2 por tonelada de clínker producida.
A través de Geocycle, filial de pretratamiento de residuos, se gestionaron 40.153 t de residuos, evitando así su derivación a vertederos. También se aumentó en un 14% el reciclaje mineral en fábricas de cemento frente a 2015.
Hasta 2016, la compañía ha rehabilitado en España 1.358 hectáreas de terreno, a través de sus planes de restauración de canteras.
Del mismo modo, el 100% de las fábricas cuentan con circuitos cerrados de reutilización y reciclaje de aguas industriales y certificación ISO 14001. Además, en la fabricación de cemento, es frecuente el empleo de agua de lluvias pluviales almacenadas y aguas residuales depuradas.
Con la publicación de los objetivos de sostenibilidad para el horizonte 2020, así como la memoria de sostenibilidad 2016, mostramos nuestro compromiso con la transparencia y con nuestra responsabilidad ambiental, gracias a que en LafargeHolcim contamos con una amplia red de personas que trabajan con un mismo objetivo: convertirnos en líderes del proceso de transición hacia una industria más sostenible y eficiente energéticamente.
Proyecto “Next Generation” reconocido en los LafargeHolcim Awards como solución a la acumulación de sedimentos en el Delta del Ebro (Tarragona)
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